Nació en Tegucigalpa en 1848 y falleció en la misma ciudad en 1893. Destacado periodista y ministro de la segunda mitad del siglo XIX. Aprendió sus primeras letras con una famosa profesora, que más tarde personificó en su obra La Maestra Escolástica. Se graduó de bachiller en filosofía en la Universidad Nacional de Tegucigalpa. Realizó estudios universitarios en Guatemala y, al triunfar la reforma liberal en ese país, en 1871, ocupó el puesto de subdirector de Hacienda y luego la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Fue cofundador del periódico El Centroamericano. Cuando el mandatario guatemalteco Justo Rufino Barrios decidió instalar a Marco Aurelio Soto y Ramón Rosa al mando de los destinos de Honduras, ambos desembarcaron en Amapala, en 1876, inaugurando el gobierno provisional en el que Rosa ejerció de Secretario General.
Fue el principal ideólogo del régimen y dio a la legislación y al sistema educativo la impronta de la filosofía positivista, lo cual se reflejó en el Código de Instrucción Pública (1882). Intentó atraer la inversión extranjera en la minería y la agricultura, después de que el proyecto de desarrollar una economía cafetalera a gran escala no fructificara.
Cuando Soto se vio obligado a presentar su renuncia como presidente de la República en 1883, Rosa se dirigió a Costa Rica y Guatemala, y no volvió al país hasta 1889, continuando su labor periodística con la fundación de la revista Guacerique. En opinión de Rafael Heliodoro Valle, tanto Rosa como Soto fueron los estadistas que dirigieron la la transformación material e intelectual de Honduras de 1876 a 1883. Rosa creía en la libertad en función del progreso.