- Tomar a changoneta la administración del Estado.
- Insultar la inteligencia de los hondureños con sus mentiras y torpes actuaciones.
- Desgastar prestigio de la investidura presidencial.
- Crear un ambiente de crispación y confrontación.
- Fomentar la división de la sociedad hondureña.
- Derrochar los fondos públicos en lujos extravagantes y afanes continuistas.
- Promover el autoritarismo y el culto a la personalidad.
- Abuso de la mentira para obtener ventajas.
- Ahuyentar la inversión con su conducta errática y amenazas de expropiaciones.
- Menospreciar la moralidad en la política.
- Aliarse con los enemigos de la patria.
- Perjudicar al país para obtener ventajas políticas. Trabajar sin descanso para aislar internacionalmente a Honduras, montarle una campaña de desprestigio y quitarle la cooperación extranjera.
- Desprestigiar los verdaderos ideales socialistas.
- Desprestigiar la actividad política en general.
- Bajar el debate político al nivel del insulto y la calumnia.
- Revivir obsoletas confrontaciones por bando ideológico.
- Promover soluciones mágicas para problemas sociales estructurales (Constituyente).
- Priorizar el revanchismo político por sobre el desarrollo social.
El mal que ha hecho Mel
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